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5.11.06

ERRORES MÁS FRECUENTES COMETIDOS EN LA CELEBRACIÓN EUCARÍSTICA I

Queremos hacer una breve relación sin ánimo de ser exhaustivos de aquellos errores o costumbres más comunes cometidos durante la celebración eucarística que no se ajustan a las normas litúrgicas con el único ánimo de ayudar a corregirlos en lo posible teniendo presente que lo más importante en la Eucaristía es, como no puede ser de otro modo, la participación en ella con un corazón devoto y fraterno y que los errores citados no son de bulto ni anulan por supuesto la validez del acto sacramental. No obstante no deben menospreciarse las normas litúrgicas ya que toda la liturgia está llena de símbolos y significados que si se pierden convertirían la acción litúrgica en pura escenografía. En este primer artículo relacionamos los que se refieren a los fieles.

A) POR PARTE DE LOS FIELES

Leer la Monición inicial (cuando lo hace una persona distinta del presidente especialmente un laico) antes de entrar el celebrante al presbiterio o durante la procesión inicial. El momento adecuado de pronunciarla es tras el saludo inicial del presidente a la Asamblea.

Acabar las lecturas diciendo “Es palabra de Dios” en vez de “Palabra de Dios” (también el sacerdote lo hace a veces).

Los lectores deben omitir la frase “Primera o Segunda Lectura” y pasar directamente a decir de quién está tomada la Lectura sin más. De igual modo no debe decirse “salmo responsorial” sino pasar directamente a la lectura de los salmos.

Omitir la reverencia o hacérsela al sacerdote en vez de al altar cuando suben a realizar alguna lectura o para la Oración de los fieles.

Permanecer sentados durante la oración sobre las ofrendas. Es el momento más importante de esa parte de la Misa y todas las oraciones de la Misa se deben oír y responder de pie, que es la actitud propia del orante y del pueblo en marcha y dispuesto. La costumbre de oír sentados esta oración está generalizada y es de difícil desarraigo.

Permanecer de pie durante el momento de la consagración (aunque por razones de edad, incomodidad del lugar, masificación u otras causas se puede permanecer de pie). En cualquier caso la Iglesia nos pide una actitud y postura común como símbolo de unanimidad.

Recitar junto con el sacerdote la doxología final que cierra la Plegaria eucarística (Por Cristo, con Cristo, etc). El pueblo debe limitarse a responder AMEN como rúbrica y asentimiento de todo lo anterior. No es un AMEN borreguil sino un AMEN de compromiso, de afirmación, que ratifica por el pueblo lo sucedido en el altar.

Leer la Oración de los Fieles desde el Ambón. El Ambón está reservado a la Palabra de Dios y ni la homilia ni la Oración de los Fieles es Palabra de Dios. No obstante se puede hacer desde allí siempre que no haya otro lugar adecuado ya que aunque no es su sitio preferente tampoco la OGMR lo excluye taxativamente (OGMR 309).

Dar golpes triples con el incensario ya que siempre deben ser dobles. Esto es extensible al sacerdote cuando usa el incensario.

Cuando se comulga en la mano la Sagrada Forma se ha recibir con la palma de la mano izquierda abierta y cogerla con la derecha para llevarla a la boca, no tomarla directamente de manos del sacerdote. El símbolo consiste en que es un don que se recibe (lo anterior no excluye otras formas como la de tomar cada fiel su Pan y mojarlo en el Vino o fórmulas parecidas dependiendo del carácter de la celebración).

Para finalizar diremos que en la procesión de las ofrendas se deberían llevar al altar sólo objetos que sean donaciones para el servicio del mismo o regalos para los pobres (por ejemplo el resultado de la cuestación hecha entre los fieles o flores) aunque se ha puesto de moda llevar al altar todo tipo de objetos (guitarras los miembros del coro, libros los catequistas, etc) lo cual puede justificarse pastoralmente pero sin abusos. Lo primero que debe llevarse siempre es el Pan y el Vino.
Jesús Luengo Mena, Lector instituido y Vicette de la Hdad de Jesús Despojado.

2 comentarios:

Emmeth dijo...

Una consulta, ¿y en el caso de las palabras dichas por el sacerdote luego de los 3 Corderos hay que arrodillarse o permanecer de pie?

Jesús Luengo Mena dijo...

Se puede permanecer de pie, pero donde exista la costumbre de arrodillarse, sígase.